El Aston Villa del Dibu igualó 2-2 con Liverpool de Mac Allister en un partidazo
Los Villanos, con el Dibu a la cabeza, igualaron 2-2 contra el Liverpool de Mac Allister en un partidazo en Villa Park.
El Liverpool de Mac Allister y el Aston Villa del Dibu se sacaron chispas en Villa Park. Y no fue para menos. Ambos equipos igualaron 2-2 en un partidazo. Los Reds, que llegaban como punteros, lo hicieron con la intención de estirar su ventaja sobre el Arsenal (escolta), pero enfrente se encontraron con un equipo durísimo. Con el Dibu como estandarte y su gente a la espalda, el Aston Villa no se dejó amedrentar y supo competir de igual a igual.Por eso mismo, no resulta raro que, en Birmingham, quienes propusieron el rumbo del partido durante todo el tiempo fueron los locales. Con un enfoque lleno de agresividad ante un rival que se notó desdibujado, al menos en los primeros compases del duelo. Porque, claro, si bien el papel de los Villanos fue dignísimo, con el correr de los minutos fue perdiendo intensidad, claridad y, por supuesto, empuje. Lo que le costó bastante caro.Un descuido en la salida de Alex García le bastó a los locales para, de la nada, encontrarse 1-0 abajo. El lateral español le regaló la pelota a Diogo Jota, quien se metió con viveza al área y tiró el pase al medio para Mohamed Salah. El egipcio definió de primera y puso en ventaja a los Reds con un disparo que el Dibu nada pudo hacer.El golpe fue brutal, pero el aliento no cesó, y los Villanos decidieron amargarle la fiesta al Liverpool. Con las mismas bases que al comienzo, pero con la sangre en el ojo, el Aston Villa creció en su juego y logró dar vuelta la historia: primero con un gol de córner concretado por Youri Tielemans, y luego con una jugada espectacular que Ollie Watkins inició y finiquitó para el 2-1 poco antes del descanso.El segundo tiempo fue otro cantar. Porque los Reds, necesitados de sumar al menos un punto para mitigar el daño, se dedicaron a hacer lo que mejor les sale: apabullar al rival. Dicho esto, las situaciones en el complemento fueron todas para la visita, quien aún así parecía no encontrarle la vuelta, o al menos hasta que Salah se escapó por la banda y le dio el pase a Alexander-Arnold, quien remató desde el área. Con la ayuda de Tyrone Mings, que se interpuso en el camino de la pelota, terminó complicándole la jugada al Dibu, para el 2-2 final.Aunque quedaba tiempo para un susto o una heroicidad, porque el Liverpool quiso ganar hasta el final y casi lo logra con un contraataque dejando a Darwin marcharse solo. Sin embargo, el Dibu, que estaba atento a la jugada, se alejó de su propia área para salir a cortar, evitar el peligro y así cerrar el duelo en igualdad.Claro que desde la previa, el empate no le servía a ninguno. El Liverpool quedó con 61 unidades y no pudo despegarse (los Gunners tienen 53 con un partido menos), mientras que los Villanos (39) no pudieron sumar dos puntos vitales en la lucha por la clasificación a las copas internacionales.